- Autor: S.J. Kincaid
- ISBN: 978-84-2048-4563
- Editorial Alfaguara
- Año: 2016
- 432 págs.
- Diabólica #1
- Precio: 18.95€
Némesis es una diabólica, un arma letal, y su misión es proteger a Sidonia, la hija de un senador galáctico. Cuando el emperador descubre que el padre de Sidonia está tramando una rebelión, quiere retenerla como rehén en su corte. Para protegerla, Némesis debe ir en su lugar y hacerse pasar por ella. Rodeada de peligros, intrigas y traiciones, Némesis deberá ocultar su identidad para sortear el peligro.
Al principio no tenemos muy claro si Némesis es humana o un robot, o quizás una combinación de ambos. Más tarde nos explican que es una diabólica, es decir, una niña diseñada para matar y, por esa razón, se le ha privado de las emociones y sentimientos inherentes en los humanos. Tan sólo siente una inmensa adoración por su ama, Sidonia, a quien debe proteger por encima de todo.
Al principio la forma de escribir me ha recordado bastante a La reina roja (pero en lugar de fantasía tenemos elementos de ciencia ficción), y a pesar de estas similitudes iniciales, lo cierto es que pronto descubrimos que S.J. Kincaid tiene un estilo propio más elaborado. Utiliza un vocabulario amplio y complejo, con palabras y expresiones que hacía mucho tiempo que no veía en un libro juvenil; ha sido una sorpresa muy reconfortante. Además, ha creado nuevas palabras para dar forma a este mundo galáctico, aunque a veces no me quedaba claro qué quería decir y hasta que no pasaban varios capítulos no entendía el concepto por completo. Los capítulos son cortos y rápidos de leer. Es un detalle que siempre agradezco porque no me gusta dejar capítulos a medias y mis ratos para leer son muy breves, justo me da tiempo a terminar uno.
De toda la variedad de personajes que aparecen en la historia, los que más me gustaron fueron Némesis, su incansable compañera Neveni y el lunático de Tyrus. A pesar de proceder de familias muy diferentes, los tres tienen algo en común: no son lo que parecen a simple vista. Y ahí reside su atractivo. Son personajes que juegan al despiste para sobrevivir y alcanzar sus objetivos.
Némesis es una protagonista diferente y compleja. Es inteligente, fuerte y letal. Desde niña la tratan como un monstruo sin alma, así que no es de extrañar que se comporte como tal, y tiene claro que el fin justifica los medios. A lo largo de la historia debe enfrentarse a multitud de obstáculos que desarrollarán su carácter, enseñándole que nada es blanco o negro, pero en el fondo sus convicciones del bien y el mal nunca cambian y actúa siempre según le dicte su instinto. Parte de esta evolución se debe a Neveni, una chica adorable y simpática que enseñará a Némesis a sobrevivir entre los embusteros miembros de la corte imperial. En cuanto a Tyrus, desde su primera aparición sabemos que será un hombre que dará mucho juego en la historia. Me parece curioso que, en un principio, se describe poco su aspecto y tan sólo vemos las locuras y disparates que hace. Pero una vez que avanzamos y el lector coge confianza con el personaje, la autora hace hincapié en lo guapo que es y el tremendo cuerpo que tiene. Me hizo gracia esta división en las descripciones.
La introducción de los personajes y la explicación del sistema espacial se extiende hasta la mitad del libro. Hasta aquí el ritmo es algo altibajo y las escenas de acción son buenas, pero breves y esporádicas, así que no llegan a destacan como deberían. Sin embargo, a partir de este punto se produce un gran giro de los acontecimientos (el primero de varios) que hace que nos quedemos pegados a sus páginas. Después es una sucesión de escenas de lucha y tensión salpicadas con otras más sosegadas y románticas, me gustó que el romance sea pausado y se tome su tiempo para aflorar.
En la recta final de la historia, las cosas estaban saliendo realmente bien para los protagonistas, por esa razón temía que la trama volviera a ponerse del revés y llevarme un mazazo emocional. Lo cierto es que llega un punto en que las conspiraciones políticas rayan en lo paranoico y el lector duda de todo el mundo (salvo de la protagonista) y no sabes quién es bueno ni malo. Cuando apenas me quedaban 20 páginas para terminar, todo se volvió muy negro y empecé a morderme las uñas (¡literalmente!) Aún así, el desenlace me ha parecido apresurado y frío, es decir, se destapan muchas revelaciones de vida o muerte y, bajo mi punto de vista, los personajes no se comportan de acuerdo a todas esas cosas tan importantes que están sucediendo. Como si pasaran por alto la gravedad de lo sucedido sin pararse a asimilar los acontecimientos.
Este libro lo publicaron como autoconclusivo, pero al poco de comprármelo anunciaron que habría una trilogía. A pesar de estar bastante harta de las sagas, Diabólica ha resultado tener una historia entretenida, interesante y algunas dosis de originalidad, y con unos personajes fuertes e impredecibles, así que no me disgusta la idea de leer una continuación siempre que la autora sepa mantener el nivel de sus tramas.
Saludos ;)
Al principio la forma de escribir me ha recordado bastante a La reina roja (pero en lugar de fantasía tenemos elementos de ciencia ficción), y a pesar de estas similitudes iniciales, lo cierto es que pronto descubrimos que S.J. Kincaid tiene un estilo propio más elaborado. Utiliza un vocabulario amplio y complejo, con palabras y expresiones que hacía mucho tiempo que no veía en un libro juvenil; ha sido una sorpresa muy reconfortante. Además, ha creado nuevas palabras para dar forma a este mundo galáctico, aunque a veces no me quedaba claro qué quería decir y hasta que no pasaban varios capítulos no entendía el concepto por completo. Los capítulos son cortos y rápidos de leer. Es un detalle que siempre agradezco porque no me gusta dejar capítulos a medias y mis ratos para leer son muy breves, justo me da tiempo a terminar uno.
De toda la variedad de personajes que aparecen en la historia, los que más me gustaron fueron Némesis, su incansable compañera Neveni y el lunático de Tyrus. A pesar de proceder de familias muy diferentes, los tres tienen algo en común: no son lo que parecen a simple vista. Y ahí reside su atractivo. Son personajes que juegan al despiste para sobrevivir y alcanzar sus objetivos.
Némesis es una protagonista diferente y compleja. Es inteligente, fuerte y letal. Desde niña la tratan como un monstruo sin alma, así que no es de extrañar que se comporte como tal, y tiene claro que el fin justifica los medios. A lo largo de la historia debe enfrentarse a multitud de obstáculos que desarrollarán su carácter, enseñándole que nada es blanco o negro, pero en el fondo sus convicciones del bien y el mal nunca cambian y actúa siempre según le dicte su instinto. Parte de esta evolución se debe a Neveni, una chica adorable y simpática que enseñará a Némesis a sobrevivir entre los embusteros miembros de la corte imperial. En cuanto a Tyrus, desde su primera aparición sabemos que será un hombre que dará mucho juego en la historia. Me parece curioso que, en un principio, se describe poco su aspecto y tan sólo vemos las locuras y disparates que hace. Pero una vez que avanzamos y el lector coge confianza con el personaje, la autora hace hincapié en lo guapo que es y el tremendo cuerpo que tiene. Me hizo gracia esta división en las descripciones.
La introducción de los personajes y la explicación del sistema espacial se extiende hasta la mitad del libro. Hasta aquí el ritmo es algo altibajo y las escenas de acción son buenas, pero breves y esporádicas, así que no llegan a destacan como deberían. Sin embargo, a partir de este punto se produce un gran giro de los acontecimientos (el primero de varios) que hace que nos quedemos pegados a sus páginas. Después es una sucesión de escenas de lucha y tensión salpicadas con otras más sosegadas y románticas, me gustó que el romance sea pausado y se tome su tiempo para aflorar.
En la recta final de la historia, las cosas estaban saliendo realmente bien para los protagonistas, por esa razón temía que la trama volviera a ponerse del revés y llevarme un mazazo emocional. Lo cierto es que llega un punto en que las conspiraciones políticas rayan en lo paranoico y el lector duda de todo el mundo (salvo de la protagonista) y no sabes quién es bueno ni malo. Cuando apenas me quedaban 20 páginas para terminar, todo se volvió muy negro y empecé a morderme las uñas (¡literalmente!) Aún así, el desenlace me ha parecido apresurado y frío, es decir, se destapan muchas revelaciones de vida o muerte y, bajo mi punto de vista, los personajes no se comportan de acuerdo a todas esas cosas tan importantes que están sucediendo. Como si pasaran por alto la gravedad de lo sucedido sin pararse a asimilar los acontecimientos.
Este libro lo publicaron como autoconclusivo, pero al poco de comprármelo anunciaron que habría una trilogía. A pesar de estar bastante harta de las sagas, Diabólica ha resultado tener una historia entretenida, interesante y algunas dosis de originalidad, y con unos personajes fuertes e impredecibles, así que no me disgusta la idea de leer una continuación siempre que la autora sepa mantener el nivel de sus tramas.
Saludos ;)
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