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sábado, 26 de octubre de 2013

DEBATE - Salir con chicas que no leen

Hoy os traigo dos artículos que leí hace bastante tiempo, pero que perdí de vista. Ahora que me he vuelto a cruzar con ellos, no voy a desaprovechar la oportunidad de enseñároslo. Se trata de un texto precioso y, aunque es largo, vale la pena dedicarle unos minutos. Imagino que mucha gente ya lo conocerá pero, para quienes no, aquí lo tenéis:

Charles Warnke: Sal con una chica que no lee

Sal con una chica que no lee. Encuéntrala en medio de la fastidiosa mugre de un bar del medio oeste. Encuéntrala en medio del humo, del sudor de borracho y de las luces multicolores de una discoteca de lujo. Donde la encuentres, descúbrela sonriendo y asegúrate de que la sonrisa permanezca incluso cuando su interlocutor le haya quitado la mirada. Cautívala con trivialidades poco sentimentales; usa las típicas frases de conquista y ríe para tus adentros. Sácala a la calle cuando los bares y las discotecas hayan dado por concluida la velada; ignora el peso de la fatiga. Bésala bajo la lluvia y deja que la tenue luz de un farol de la calle os ilumine, así como has visto que ocurre en las películas. Haz un comentario sobre el poco significado que tiene todo eso. Llévatela a tu apartamento y despáchala tras hacer el amor. Tíratela.


Deja que la especie de contrato que sin darte cuenta has celebrado con ella se convierta poco a poco, incómodamente, en una relación. Descubre intereses y gustos comunes como el sushi o la música conuntry, y construye un muro impenetrable alrededor de ellos. Haz del espacio común un espacio sagrado y regresa a él cada vez que el aire se torne pesado o las veladas parezcan demasiado largas. Háblale de cosas sin importancia y piensa poco. Deja que pasen los meses sin que te des cuenta. Propónle que se mude a vivir contigo y déjala que decore. Peléate por cosas insignificante como que la maldita cortina de la ducha deber permanecer cerrada para que no se llene de ese maldito moho. Deja que pase un año.
Concluye que deberían casarse porque, de lo contrario, habrías perdido mucho tiempo de tu vida. Invítala a cenar a un restaurante que se salga de tu presupuesto y asegúrate de que tenga una vista hermosa de la ciudad. Tímidamente pídele al camarero que traiga una copa de champan con el modesto anillo dentro. Apenas se de cuenta, propónle matrimonio con todo el entusiasmo y la sinceridad de los que puedas hacer acopio. No te preocupes si sientes que tu corazón está a punto de atravesarte el pecho, y si no sientes nada tampoco le des importancia. Si hay aplausos, deja que terminen; si llora, sonríe como si nunca hubieras estado tan feliz, y si no lo hace, igualmente sonríe.

Deja que pasen los años sin que te des cuenta. Construye una carrera en vez de conseguir un trabajo. Compra una casa, ten dos hermosos hijos y trata de criarlos bien. Cae en una aburrida indiferencia y luego en una tristeza de la misma naturaleza. Sufre la típica crisis de los cincuenta. Envejece. Sorpréndete por tu falta de logros, sientete satisfecho pero vacío la mayor parte del tiempo. Contrae una enfermedad terminar. Muere, pero después de darte cuenta de que la chica que no lee, jamás hizo vibrar tu corazón con una pasión que tuviera significado.

Haz todas estas cosas porque no hay nada peor que una chica que lee. Hazlo, te digo, porque una vida en el purgatorio es mejor que una en el infierno. Hazlo porque una chica que lee posee un vocabulario capaz de describir el descontento de una vida insatisfecha. Un vocabulario que analiza la belleza innata del mundo y la convierte en una alcanzable necesidad, en vez de algo maravilloso pero extraño para ti.
Una chica que lee hace alarde de un vocabulario que puede identificar lo espacioso y desalmado de la retórica de quien no puede amarla, y la inarticulación causada por el desespero del que la ama en demasía. Un vocabulario que hace de mi sofisticada vacía un truco barato.

Hazlo porque la chica que lee entiende de sintaxis. La literatura le ha enseñado que los momentos de ternura llegan en intervalos esporádicos, pero predecibles, y que la vida no es plana. Sabe y exige que el flujo de la vida venga con una corriente de decepción. Sabe cuál es la diferencia entre un episodio de rabia aislado y los hábitos de alguien amargado y sin razón ni propósito. Tiene claro que en su vida hay quienes son unos simples puntos suspensivos, o una etapa, y por eso decide seguir con su camino. El ritmo y la sintaxis le permite reconocer la cadencia de una vida bien vivida.

Sal con una chica que no lee porque la que sí lo hace sabe de la importancia de la trama y puede rastrear los límites del prólogo y los agudos picos del climas; los siente en la piel. Será paciente en caso de que haya pausas o intermedios, e intentará acelerar el desenlace. Pero sobre todo, la chica que lee conoce el inevitable significado de un final y se siente cómoda en él, pues se ha despedido ya de miles de héroes con apenas una pizca de tristeza.

No salgas con una chica que lee porque ellas han aprendido a contar historias, y Tú eres el que le ha hecho la vida tan difícil. La lectora se ha convertido en una espectadora más de su vida y la ha llenado de significado. Insiste en que la narrativa de su historia es magnífica, variada, compleja; en que los personaje secundarios son coloridos y el estilo atrevido. Tú, la chica que lee, me hace querer ser todo lo que no soy. Pero soy débil y te fallaré porque tú has soñado, como corresponde, con alguien mejor que yo y no aceptarás la vida que te describí al comienzo de este escrito. No te resignarás a vivir sin pasión, sin perfección, a llevar una vida que no sea digna de ser narrada. Por eso, largo de aquí, chica que lee; coge el siguiente tren que te lleve al sur. Te odio, de verdad te odio.

Fuente: El malpensante

Decidme, por favor, ¿qué os ha parecido?
¿Qué conclusiones sacáis?

Si queréis leer la siguiente parte: Salir con chicas que leen.

Saludos ;)

3 comentarios:

Miss.Navegante dijo...

Pues me encantó, también.

Celeste c dijo...

Creo que me toca coger el tren jaja.. amo ser una chica que lee.. Muy linda entrada! ;)

hrociog dijo...

jajajaja, es buenísimo el texto, me encanta, yo desde luego estoy orgullosa de ser una chica que lee, así que mi chico a currarselo!! XD

Un besito^^